lunes, febrero 07, 2005

ja, ja, ja, ja... ja

XII.
Nada bueno saldrá de todo esto, tienes que convencerte.
Nada.
Nada bueno te espera en la esquina, será la misma
monótona y aburrida esquina de siempre.
Es gracioso, podría seguir semanas así
otra vez que me quedé varado
en mis propias ideas
naufragando en un mar de señales
inconclusas,
aplastando una vocal en desdicha.
Nada bueno saldrá de todo esto, estoy seguro
el pasado vuelve y cada vez
es más puntual
te toca la puerta con una especie de sonrisa sincera.
Te saluda, te da la mano
te dice: sé sabio, amigo.
Sé sabio.
Pero el sarcasmo es atronador, ojalá algún día
todos se mueran de verdad.
Espero que me dejen en paz, alguien se ríe conmigo
cómo nos divertimos siempre.
Fumamos
y jugamos tumbaditas encima del pasto.
¿Quién ha regresado de las cenizas con la noticia
de un secuestro?

XIII. Superación
No me interesa tu sábado a la tarde
ni tu trabajo, ni nada.
No me interesa saber más de ti, de tu soledad
o tus problemas.
Ya no me interesa conseguir tu amor,
o dañarlo.
Ya no soy más títere de tus desencuentros,
ni te espero en la esquina,
ni te llamo por teléfono rogándote perdón.
Felizmente he salvado lo poco
que queda de mí
y lo he reunido alrededor de una fogata.
Leí un par de libros autoayuda
y me desintoxiqué.